El año 2020 comenzó de la mejor manera para la empresa Piersanti Plataformas, ubicada en localidad cordobesa de Noetinger, porque ha obtenido el título de patentamiento su Cabezal Hilerador Draper de doble hilera adaptable a cosechadoras de 30 a 45 pies de ancho para el cultivo de poroto.
El título fue otorgado por el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) y el draper permite cortar al ras del piso y depositar en el suelo el material cortado formando hileras. Este cabezal está pensado para cultivos como el poroto que se produce en la provincia de Salta. Anteriormente a este invento, el trabajo se hacía de forma manual o mecanizada, pero de baja productividad, debido a los pequeños anchos de corte de los cabezales.
Entre las funciones, puede destacarse el hecho de que el cabezal se acople a una cosechadora es lo que los distingue de los que se encontraban en el mercado, hasta el momento, que son de arrastre. La aplicación la vemos en el cultivo de poroto, orgánico principalmente, que requiere secarse de manera natural y no permite el uso de fitosanitarios. Esos cordones de material en el piso se secan de manera pareja y natural. Por otra parte, el sistema de recolección y el ancho de los cabezales permiten hilerar más superficies de cultivo en menor tiempo.
Un poco de historia
El fundador de la empresa, Juan Carlos Piersanti, logró en tiempo récord el otorgamiento del título gracias a la utilización del Programa de Examen Prioritario de Patentes (PEP), que acelera el estudio de fondo de solicitudes de patentes, dentro de los 60 días corridos desde la presentación del formulario reglamentado y es sometido a un estudio con la misma rigurosidad y calidad que en el trámite convencional. Juan Carlos fue uno de los dos primeros en obtener la patente mediante este programa.
El primer acercamiento de Piersanti al INPI fue en el año 2008 cuando comenzó a desarrollar un sistema de corte para sus cabezales, con la novedad de mantener la barra de corte flexible sobre un sistema de lonas rígido. Diez años después, en 2018, finalmente la firma obtuvo su primera patente de invención por ese desarrollo.
Hasta el año 2008 la empresa ni siquiera había registrado la marca así que haberse acercado al INPI representó un cambio significativo en la estrategia para comenzar a gestionar la protección de los derechos de propiedad intelectual. Con este reconocimiento, Piersanti se vuelve más competitiva y cuenta con otra carta de presentación con una serie de inventos protegidos.
Innovar para crecer
Con años de experiencia y conocedor de la protección de los intangibles, el empresario aseveró que la búsqueda de antecedentes previo a comenzar con un desarrollo es beneficioso en todo sentido. Al respecto contó: “el estudio jurídico que nos acompaña siempre hace los deberes y es de mucha ayuda la búsqueda previa para saber por dónde debemos ir y si estamos yendo por el camino adecuado. Por este motivo, ni bien supimos, en este caso puntual, que no había en el mundo algo similar, avanzamos”.
Para finalizar, ejemplificó su manera de actuar ante los productos y nuevas ideas: “actualmente, pensamos en un desarrollo y lo que hacemos es convocar de manera casi inmediata a nuestro agente de la PI para anoticiarlo y requerirle la búsqueda de antecedentes correspondientes. En caso de que el desarrollo parezca susceptible de ser protegido lo desarrollamos. Esto implica un cambio en la manera de pensar los nuevos desarrollos, que comienzan en la dirección de la empresa y trasciende al resto de las áreas”.
Ficha técnica
*Cabezal hilerador Piersanti H3502, en versiones de 30, 35 y 40 pies, apto para el corte e hilerado de poroto, chía, pasturas y otros cultivos.
*Ancho de corte: 30/40 pies.
**Sistema de corte: Barra de corte flexible y flotante.
Sistema de acarreo: Tipo draper, con lona central compartimentada en dos tramos independientes.
*Sistema de hilarado: Descarga hacia uno o ambos laterales.
*Molinete: Orbital.
*Preembocador: regulable y adaptable a todas las marcas de cosechadoras.
*Transporte: Carro de transporte.
